“Contemplando Las Cosas Eternas” Poniendo Nuestra Fe En Dios Y En Sus Promesas 1 Corintios 2:9 RVR 1960

“Contemplando Las Cosas Eternas”

Poniendo Nuestra Fe En Dios Y En Sus Promesas

“Contemplando Las Cosas Eternas”

1 Corintios 2:9 RVR 1960

Para contemplar las cosas eternas se necesita Fe…

La necesidad de la FE es un derecho fundamental para todas las personas y la respuesta necesaria a la auto-revelación de Dios. El único canal a través del cual se pueden recibir las bendiciones de Dios, y el único medio por el que la vida se puede presentar significativa, en relación con Dios.

Nuestra Fe debe ser una constante búsqueda de confianza y dependencia hacia el Señor.

1 Corinthians 2:8–10 RVR60

la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria. Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman. Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios.

1 Corinthians 2:8-10

(RVR1960)

8 la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria.

9 

Antes bien, como está escrito:

    Cosas que ojo no vio, ni oído oyó,

    Ni han subido en corazón de hombre,

    Son las que Dios ha preparado para los que le aman. m

10 Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios.

Se nos exhorta a apartar de forma deliberada los ojos de las cosas que se ven y fijarlos en las que no se ven.

Refiriéndose a las cosas eternas, la Palabra de Dios dice: “Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman” (1 Corintios 2.9).

El Espíritu Santo nos revela cosas maravillosas y permanentes que los ojos físicos no pueden alcanzar a ver.

Por lo tanto, la Palabra nos dice en:

Romans 8:24 RVR60

Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?

Romans 8:24

(RVR1960)

24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?

La Biblia afirma que hay quienes tienen la facultad de mirar lo que para otros permanece oculto.

Faraón vio en su sueño las vacas que subían del río; pero José, iluminado por Dios, vio el significado de aquellas vacas.

El siervo de Eliseo vio la ciudad rodeada por los ejércitos sirios; pero el profeta de Dios observó los carros de fuego de los ejércitos celestiales a su alrededor.

El rey Belsasar vio la mano que escribía sobre la pared; pero el profeta Daniel pudo ver quien estaba detrás de aquella mano y aquella escritura.

Los enemigos de Esteban veían a un renegado acusado de hablar contra Dios y la ley de Moisés y comenzaron a apedrearlo para que muriera; pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, veía algo muy distinto: Al Señor Jesucristo sentado a la diestra de Dios el Padre y a las puertas abiertas del cielo.

El apóstol Pablo llama a Dios el “Rey de los cielos, inmortal, invisible” al escribirle a Timoteo. Y en Colosenses capítulo uno dice que Cristo es la imagen visible del Dios invisible, por quien fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, las visibles y las invisibles.

Escribiendo a la iglesia en Roma:

Romans 1:20 RVR60

Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.

Romans 1:20

(RVR1960)

20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.

de modo que los seres humanos no tienen excusas para decir que no conocen a Dios.

Fijaremos nuestras miradas más allá de lo que ven nuestros ojos físicos. Pondré mi mirada en Dios y sus promesas.

Psalm 37:3–5 RVR60

Confía en Jehová, y haz el bien; Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará.

Psalms 37:3-5

(RVR1960)

3 

Confía en Jehová, y haz el bien;

Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad.

Proverbs 3:5–6 RVR60

Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.

4 

Deléitate asimismo en Jehová,

Y él te concederá las peticiones de tu corazón.

Isaiah 26:4 RVR60

Confiad en Jehová perpetuamente, porque en Jehová el Señor está la fortaleza de los siglos.

5 

(RVR60) — 5 Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. 6 Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.

Encomienda a Jehová tu camino,

Y confía en él; y él hará.

(RVR60) — 4 Confiad en Jehová perpetuamente, porque en Jehová el Señor está la fortaleza de los siglos.

(RVR60) — 5 Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. 6 Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.

(RVR60) — 4 Confiad en Jehová perpetuamente, porque en Jehová el Señor está la fortaleza de los siglos.

Amen!!!!